Realmente no sé si el título de esta película (de vuelta a la acción) hace referencia al regreso triunfal de Cameron Díaz a la gran pantalla después de más de diez años, o es solo un título muy bien definido por el director Seth Gordon para esta interesante trama. Lo cierto es que, aunque no es una deslumbrante película de Hollywood, pues se centra en la ya trillada trama de los agentes que se retiran para formar familia en secreto, cumple su propósito de entretención de principio a fin y nos saca una que otra carcajada.

“No le puedes decir que no a Jamie” expresó Cameron Díaz para justificar su regreso al cine, y comentó: “No me he mantenido con ningún tipo de entrenamiento, no he hecho nada público. Dije que no a todo, más allá de mi negocio de vinos. He estado tratando de sobrevivir como cualquier otra madre. Tratando de seguir adelante”.

De vuelta a la acción (“Back in action” en inglés) está protagonizada por Cameron Díaz quien interpreta a Emily, y Jamie Foxx como Matt, ex agentes de la CIA; en una operación, ella descubre que está embarazada precisamente de Matt, su compañero habitual en las operaciones de la agencia, y después de un escape inesperado tras la caída de un avión, estos deciden retirarse clandestinamente para formar su familia en paz. Pasados quince años desde su retiro en secreto, y con una familia eventualmente normal, son contactados por Chuck (Kyle Chandler) su antigua jefe en la CIA, quien les advierte que los encontraron y ahora serán perseguidos para que devuelvan la llave, un aparato que se quedaron en la última operación que realizaron hace quince años, y mientras este todavía les advertía, recibe un disparo certero en el cuello por un grupo comando que llega para atraparlos, por lo que estos de inmediato deben buscar huir, y es así como, luego de lograr evadir al grupo comando, van al colegio en busca de sus dos hijos Alice y Leo (McKenna Roberts y Rylan Jackson) para después ir corriendo al aeropuerto a tomar un avión con destino a Londres.

En Londres se presentan en la casa de Ginny (Glenn Close) la madre de Emily a la que odia con todo su corazón por haber sido tan fría con ella en la infancia y por separarla al enviarla a un internado en los Estados Unidos; después de presentarle a sus nietos, a los que obviamente no conocía, es advertida de que va a recibir seguramente inesperadas visitas de parte de agentes federales ya que Matt escondió la llave en su propiedad hace quince años. De esa manera se va desarrollando esta de comedia de acción, en donde además presenta notables interpretaciones como las de Andrew Scott quien interpreta a Baron, compañero de estos en la CIA con un alto cargo en la actualidad y que todavía sigue enamorado de Emily, y Jamie Demetriou que encarna a Nigel, la pareja actual de Ginny, un torpe vividor que se cree espía de la agencia, y al que todo le sale mal, pero termina salvando el día inesperadamente.

Esta película ya se encuentra disponible en la plataforma de Netflix, lamentablemente no ha recibido buenos comentarios de la crítica especializada.
The wrap los destrozó literalmente al comentar: “para películas así se inventó la palabra mediocre, porque no es que esta película sea mala. No es lo suficientemente interesante ni ambiciosa como para ser mala. Simplemente es”.
En Collider sostuvieron: “el guiòn aburrido y cargado, nunca dan a Foxx y Díaz la oportunidad de desplegar sus músculos dramáticos y rara vez consiguen ser graciosos”.
Por su parte telegraph dijo: “Es una comedia de espías de Netflix totalmente anodina”.
Finalmente, Heaven of horror sostuvo que: “tiene crimen acción y bastante comedia, lo que la convierte en una sólida película familiar”.

Yo sin embargo la disfruté. No me encantó, pero me gustó, se nota mucho que los interpretes se la pasaron muy bien en las grabaciones con tantas acrobacias y autos volando y peleas épicas, pero desafortunadamente toda esa diversión que seguramente ellos sintieron no la sintieron los espectadores de la película.
Cabe destacar que rotten tomatoes le dio un 62 % de aceptación. Bastante bajo tomando en cuenta la calidad actoral del elenco y el presupuesto aportado por Netflix.